The Great Green Wall o La Gran Muralla Verde, es un proyecto tan ambicioso como prometedor. Plantea la construcción de una gran barrera de árboles entre Senegal y Yibuti, dispuesta en 7.700 kilómetros de largo y 15 kilómetros de ancho. También contempla la construcción de un dique y de un gran sistema de riego.
En el desarrollo de la Gran Muralla Verde, en principio, participaban 11 países del continente africano: Burkina Faso, Chad, Yibuti, Eritrea, Malí, Mauritania, Níger, Nigeria, Senegal y Sudán. Hoy ya son más de 20. Argelia, Benín, Cabo Verde, Egipto, Etiopía, Libia, Somalia, Gambia y Túnez se han unido a esta iniciativa que busca reverdecer a la región.
Cuenta con el apoyo financiero de diversas organizaciones, entre ellas el Banco Mundial, la FAO, la Unión Europea, el Banco Africano de Desarrollo y otras entidades privadas, como la International Conservation Caucus Foundation. Entre todas, durante más de una década de trabajo, han invertido alrededor de 8.000 millones de dólares.