En cambiar residuos plásticos por beneficios monetarios, por ello, los creadores de esta moneda digital invitan a las personas a recolectar residuos plásticos que se encuentran tan presentes en uno de los balnearios históricos de Uruguay y a cambio reciben una especie de Bitcoin que otorga a quien la posea descuentos y permite comprar ciertos productos.
Una cuestión que destaca en esta iniciativa es la siguiente: no todos los residuos valen lo mismo, ¿qué quiere decir eso?, que si la persona recolecta un kilo de plásticos en su hogar puede canjear ese kilo por 100 Plasticoins. El pago se eleva de acuerdo al lugar, si el kilo de plásticos fue recolectado en la playa, el pago asciende a 200 Plasticoins, y aún mejor, si la persona logra recolectar en la playa un kilo de microplásticos, a la hora de canjearlos le darán 400 Plasticoins, en este caso el pago se duplica porque los microplásticos son más difíciles de juntar y limpiar, de esta manera los creadores de este incentivo verde buscan premiar el esfuerzo.