A pesar de que al principio fueron bastante bien aceptados y se han ganado sus seguidores y defensores a nivel mundial, los productos transgénicos se han posicionado como un punto de debate fijo entre especialistas, conservacionistas y nutricionistas, entre otros.
Todo esto debido a que a pesar de que muchos bandos a favor afirman que los alimentos son mucho más duraderos, resistentes, nutritivos y rápidos de cosechar; el resto de los expertos, por el contrario, sostienen que, estos cuentan con un mayor número de desventajas y amenazas que cualquier beneficio que pudiera aportarle al consumidor.