La relación entre las empresas de países desarrollados, como China, y los países que necesitan financiamiento es una de aparente simbiosis. Sin embargo, eso está lejos de ser así.
El que aún buena parte del mundo submarino permanezca alejado de la total comprensión de los seres humanos, no lo preserva de las potenciales amenazas de una industria tan destructiva como la minera.
La necesidad de seguir buscando opciones hacia la verdadera transición energética, ha llevado a probar el sodio como posible sustituto al litio en las baterías.