La investigación es la más ambiciosa que se ha hecho en cuanto a medir el impacto de la luz y el ruido humanos en las poblaciones de aves.
La Unesco declaró el cielo estrellado como Patrimonio Cultural de la Humanidad en 2008. Observar la bóveda celeste con sus estrellas es un bien que ha permitido el desarrollo de culturas y pueblos y de ...